miércoles, 11 de mayo de 2011

CASCO HISTORICO DE LA GUAIRA TIENE HERIDAS ABIERTAS

PATRIMONIO_ La inversión estatal después del deslave ha sido insuficiente.
Edificaciones de gran valor arquitectónico siguen derruidas ante la indiferencia gubernamental

POR: LILIA MALAVÉ G.
FOTOS: MIRIAM CAÑAS
A once años de la tragedia de Vargas, una de las zonas que aún muestra las heridas es el casco histórico del litoral central. Algunas casas no han sido rescatadas de la avalancha de lodo y piedras que en 1999 bajó de la montaña y afectó gravemente los inmuebles, engulló paredes construidas hace 200 años y dejó grandes boquetes en las que quedaron en pie.

Algunas casas no han sido recuperadas de la avalancha de lodo y piedras ocurrida en 1999
El evidente deterioro del patrimonio histórico de La Guaira no es sólo consecuencia del deslave: la basura, la maleza y hasta la malicia de los propietarios son parte del cáncer que carcome el sector.

Las calles El Comercio y Bolívar son hoy una mezcolanza de estilos arquitectónicos, donde se levantan edificios contemporáneos, casas coloniales y republicanas e, inclusive, construcciones art decó –como la Casa del Correo, que data de la década de los treinta–. Es evidente que falta el aporte estatal, necesario para preservar la memoria del que fue, en la Colonia, el principal puerto de la nación.

La Fundación Historia, Ecoturismo y Ambiente es una ONG dedicada al rescate del valor turístico del centro histórico de La Guaira. Liderada por Derbys López, los miembros de la organización han trabajado por más de tres años para reconstruir la memoria histórica de la zona, principalmente mediante el contacto con los pobladores de mayor edad y la investigación documental.

La ruta turística denominada La Guayra Ecopatrimonial es una muestra del trabajo que han realizado al movilizar a casi 500 visitantes. “La Guaira tiene más atractivo histórico que Coro, pero las autoridades no han tomado en cuenta el potencial turístico y han permitido que su gran valor patrimonial continúe deteriorándose después del deslave”, afirma López. En cada una de las tres cuadras que abarca la avenida Bolívar hay, sin excepción, estructuras que fueron casonas del siglo XVIII, pero que sólo conservan de su diseño original algunas paredes. Adentro, basura, escombros, vegetación y tierra hacen las veces de piso.

En el caso de las que conservan la fachada, rejas gastadas por el salitre y antiguos portones de madera desvencijada encierran el mismo panorama. El denominador común es la ausencia de techos, y las casas, con el cielo como tope, se convierten en simples terrenos baldíos rodeados de muros de tierra, adobe y piedra. La inexistencia de techos en algunas construcciones tiene explicación, de acuerdo con López: “En la década de los sesenta se dictó una ordenanza para proteger el casco histórico. La medida prohibió las modificaciones a las casas de época, con la excepción de aquellas cuyos techos comenzaran a filtrar agua por su antigüedad. Eso ató de manos a muchos propietarios, que aún hoy quieren disponer de los terrenos para construcciones contemporáneas; así que comenzaron a destruir los techos adrede y los dejaron sin impermeabilización, lo que permitió que la lluvia consumiera las casas”.

Para sanear las viviendas del casco histórico y también las que están en manos de familias que no podían costear las reparaciones después del deslave, la Vicepresidencia Ejecutiva de la República y la Gobernación del Estado Vargas, durante la gestión de Antonio Rodríguez San Juan, anunciaron en 2006 la inversión de 7,5 millones de bolívares.

El proyecto preveía recursos por un monto total de 15 millones de bolívares en 2 etapas. Por lo que se observa hoy en día, las obras –que duraron hasta 2008– no fueron completadas. “Restauraron algunas fachadas y frisos, pero no se ocuparon de la humedad interna de las edificaciones, y ahora se desmoronan. Lo que hicieron fue como maquillar a un enfermo sin atender su problema de salud”, afirma López.


La comunidad ha conservado los fortines coloniales El Vigía y San Carlos


La otra cara de la moneda.

No todo es desolación en la zona histórica del litoral central. Hay casas que, más allá de mantenerse en pie, conservan intacto su valor arquitectónico, gracias a los trabajos de conservación hechos por la comunidad con el patrocinio de instituciones como la Universidad Simón Bolívar y la Embajada de España.

Ejemplo del esfuerzo comunitario por conservar el patrimonio son los fortines coloniales El Vigía y San Carlos, que desde la montaña resguardaban el puerto de los ataques de los piratas. Ambos constituyen actualmente privilegiados miradores, con el valor agregado de que son testimonio histórico conservado en el tiempo gracias a la voluntad de los guaireños.

1|Antes, casonas. Ahora, botaderos
 Muros de adobe y tierra, producto de dos siglos de evolución arquitectónica, son en ocasiones la única evidencia de que en terrenos baldíos –en apariencia botaderos de basura y escombros– existieron alguna vez grandes casonas coloniales. Las comunidades no han hecho más que utilizar el lote para verter los desechos sobre fragmentos de historia que alguna vez fueron parte de viviendas o edificaciones suntuosas, como sedes diplomáticas, comunes en el puerto durante la Colonia

2| Salitre, basura y casas destechadas

La práctica de permitir la destrucción de los techos en algunas casonas acabó con estructuras completas en 11 años de precipitaciones constantes. La recuperación de esas edificaciones depende de las autoridades patrimoniales de Vargas debido a la falta de interés de los propietarios. El salitre tampoco ha ayudado a la conservación de los inmuebles. La basura arrojada con descuido no forma parte originalmente del casco histórico, pero ya es una tradición en esas calles por las que transita a diario la comunidad, en su mayoría descendientes de los fundadores de La Guaira

3| Historia recuperada

No todo está perdido en el casco histórico de La Guaira. Hay quienes han adaptado el uso actual del inmueble a la arquitectura, como la casa Moreau y Machado, agente aduanal que funciona en la calle El Comercio desde la Colonia. También hay ferreterías, librerías y hasta un restaurante escuela en la calle Bolívar. Algunos propietarios se han encargado de mantener los frisos en condiciones adecuadas, con lo que se ha conservado el valor patrimonial. Instituciones como la

Embajada de España y la USB contribuyen con la conservación de casas, en particular las que están ubicadas en la calle donde se presume que nació José María Vargas y donde habitó el primer antepasado del Libertador que llegó a Venezuela: Simón Bolívar, el viejo.

FUENTE: DIARIO EL NACIONAL,10 DE MAYO DE 2011; CUERPO CIUDADANOS, PÁG. 1

sábado, 23 de abril de 2011

LA FRAGATA PRESIDENTE SARMIENTO EN LA GUAYRA





Por: Derbys López
Fotos Actuales: Roberto Ireguí
En la ciudad de Buenos Aires, Anclada en uno de los diques de Puerto Madero, sobre la costa del Río de la Plata, encontraremos la Fragata Presidente Sarmiento, una de las embarcaciones más emblemáticas de la República Argentina.
Buque Museo A.R.A Fragata “Presidente Sarmiento”
La fragata A.R.A. Presidente Sarmiento se convirtió en 1897 en el primer buque escuela moderno que tuvo la Argentina. Su nombre fue en homenaje al Presidente Domingo Faustino Sarmiento quien tuviera como ideal que los jóvenes marinos de Argentina  recorrieran el mundo
Roberto Ireguí, Miembro Asesor Fundhea
La fragata fue proyectada y diseñada en 1895 y construida en 1896, por el ingeniero Bevis de la empresa Laird Brothers, en Birkenhead, Liverpool, Inglaterra. Posee 85,5 m de eslora, 13,32 de manga, un casco de acero forrado hasta la línea de flotación con madera de teca y una arboladura compuesta por un palo mayor de 54,3 m de altura, un trinquete de 52 m y una mesana de 42,5 m. también posee 21 velas con 2300 metros cuadrados de superficie, más 12 velas suplementarias (alas y rastreras). Como propulsión auxiliar tenía una máquina de vapor de 1.800 caballos de fuerza.
Mientras permaneció en servicio, la fragata Presidente Sarmiento cumplió 37 viajes de aplicación con los alumnos de la Escuela Naval Militar siendo siempre embajadora de Paz de la Nación Argentina, aún en tiempos de guerra internacionales. Comenzó el primero de ellos el 12 de enero de 1899. El día 18 de abril de 1938 la gloriosa nave zarpaba del Puerto de Buenos Aires para cumplir el último de los viajes de aplicación, que finalizaría en noviembre de ese año. En ella se formaron 23.000 cadetes y oficiales navales.
Su último destino de actividad fue el de buque escuela para el adiestramiento del personal subalterno de la Escuela de Marinería y curso profesional de Cabos de Mar, siendo 1961, su último año como unidad naval.
Fue declarada Monumento Histórico Nacional (Argentina) el 18 de junio de 1962 por Decreto Nº 5589 y convertida en buque museo el 22 de mayo de 1964. 
Área museística
 En su interior se exhiben varios objetos llamativos: fotos de todas sus actividades por el mundo, uniformes navales de diferentes épocas, una piedra que perteneció a la Gran Muralla China, el cuerpo embalsamado de un de perro Terranova llamado “Lampazo” quien fue en vida mascota de la fragata, y una bandera de Argentina confeccionada en Shangai, cuyo sol fue bordado con los ojos rasgados.

LA FRAGATA EN EL PUERTO DE LA GUAYRA

El 14 de mayo de 1933, en visita de cortesía y de cordial acercamiento internacional, dio fondo en el puerto de la Guaira el buque escuela "Presidente Sarmiento", trayendo a bordo la Escuela Naval de Argentina. Ya en la rada, saluda con 21 cañonazos a la Bandera venezolana ondeada en el Fortín de El Vigía, y luego se le respondió con el saludo de igual manera.
La Fragata haciendo el saludo a la Plaza. Al fondo Cabo Blanco
 Después de los saludos de ordenanza, en la lancha de la Aduana se trasladaron a bordo a dar su bienvenida al Comandante Pedro S. Quihillalt y a su Oficialidad las autoridades militares y civiles de la Plaza, el Cónsul General de Argentina en Caracas y el Vicecónsul de la misma nación en La Guaira. 
Luego en la misma tarde el Cap. Quihillalt, sus altos oficiales y cadetes desfilaron por la Calle El Comercio hasta la estación del ferrocarril, frente a la Aduana (Casa Guipuzcoana) donde subieron  a Caracas, siendo recibidos por el Coronel Carlos Sánchez, Director de Marina en el Ministerio de Guerra y Marina, quien los condujo al Hotel Majestic como huéspedes de honor del Gobierno Nacional, por orden del Gral. Juan Vicente Gómez. En los días subsiguientes se desarrollaron en medio de la mayor armonía y cordialidad los diversos números del programa protocolar elaborado por el Gobierno venezolano, en honor de los distinguidos marinos de la gran Nación del Sur, que fueron  agasajados por toda la sociedad caraqueña y guayreña.
Los cadetes y marinos de la Escuela Naval Argentina desfilan por la calle El Comercio de la Guayra
Los oficiales del La Fragata Presidente Sarmiento fueron testigos en la primera transmisión radiotelegráfica realizada entre Venezuela y Argentina.
 Todos estos actos, quedaron registrados para la historia a través del lente del fotógrafo guayreño Pedro Bosques Fernández.
La Fragata "Presidente Sarmiento" anclada en La Guaira

Enseñar historia desde el propio lugar de los hechos

Rutas de Fundhea incluidas en manual de la universidad de Barcelona (España)
JAVIER BRASSESCO EL UNIVERSAL domingo 10 de abril de 2011
 Descendiente del escritor Francisco Lazo Martí por el lado paterno y del prócer independentista Domingo Montes por el materno, Derbys López estaba condenado a interesarse por la historia y sus vericuetos. Pero más que repetir fechas y lugares desde un salón de clase, él optó por intentar transmitir su amor por la historia desde el propio lugar de los hechos. Fue así que el 15 de julio de 2007 nació Fundhea (Fundación Historia Ecoturismo y Ambiente, la cual creó junto a Arturo Rivero y Aura Caamaño) y con ella el programa educativo de rutas ecopatrimoniales. El programa acaba de ser incluido en el proyecto de buenas experiencias en turismo cultural en Iberoamérica que lleva adelante la Universidad de Barcelona, España, una iniciativa auspiciada por la Organización de Estados Iberoamericanos.
Una idea que se hizo ruta
En el principio, cuenta López, fue la investigación histórica, y el ecoturismo y sus rutas, que también eran un interés de Fundhea, andaban por otro lado. Hasta que un día a los miembros de la organización se les ocurrió mezclar ambos. Fue así que nació la primera ruta, que se llamó La Guaira Ecopatrimonial, en la cual no sólo se hacía un recorrido por los lugares históricamente imperantes de la región, sino que al mismo tiempo se iban contando cosas que no suelen estar en los libros. A López le gusta contar, por ejemplo, la historia de un presidente que cargó carbón en La Guaira. Se trató de Manuel Felipe de Tovar, quien era vicepresidente de la República cuando el puerto de La Guaira fue tomado por sus enemigos los federalistas en 1859. Henry Lord Boulton lo esconde en sus galpones, y finalmente logró sacarlo en una fragata americana hacia Puerto Cabello disfrazado de obrero y cargando dos bolsas de carbón. Ese mismo año sería presidente del país. Luego idearon la ruta de El Calvario, que llamaron "El ego de dos presidentes". Recibió ese nombre porque cuando Antonio Guzmán Blanco decidió hacer en el cerro de El Calvario la primera intervención paisajística que se hacía en el país, llamó a ese lugar "Paseo Guzmán Blanco". Y luego Joaquín Crespo construyó en la parte bajo su hacienda Santa Inés y rebautizó el parque (que por entonces ya no se llamaba Guzmán Blanco sino Paseo Independencia) como Caño Amarillo, que fue una de las célebres batallas en las que tomó parte. En el paseo "Tras la huella de Guzmán" se cuenta, entre otras cosas, todos los percances que atravesó la estatua ecuestre del Libertador, que inicialmente se iba a inaugurar el 28 de octubre, día de San Simón, pero el barco en el que venía naufragó en Los Roques y se rescató solo gracias al empecinamiento de Guzmán Blanco, y finalmente se inauguró el 7 de noviembre de 1874. También hacen un recorrido por los restos del sistema de fortines que alguna vez defendió la ciudad y por el viejo Camino de los Españoles, que por tantos años fue la principal conexión entre la capital y su litoral. Parte de estas rutas se hace en rústico y también a pie. La fundación es asesorada por un grupo de historiadores, cronistas y arqueólogos y se mantiene a flote y perfectamente operativa a pesar de que nunca ha contado con patrocinio p´ublico y privado. Si usted desea participar en alguno de sus recorridos puede llamar al teléfono 04164130136.
Las charlas tienen lugar en espacios donde ocurrieron algunos de estos hechos históricos (Manaure Quintero)

domingo, 27 de marzo de 2011

28º RECORRIDO RUTA "LA GUAYRA ECOPATRIMONIAL"

En Marco del Proyecto Educativo “La Guayra Ecopatrimonial” se realizara 28º Recorrido por el Casco Histórico de La Guayra el Sábado, 16 abril de 2011, con el objetivo de despertar el interés de desarrollar el Turismo hacia esta Zona.

"LA GUAYRA ECOPATRIMONIAL” es una ruta donde los participantes conocerán los atractivos Histórico-culturales del Casco Histórico que posee la ciudad de La Guayra. Durante este recorrido conocerán las principales calles con ambiente colonial, la casa Guipuzcoana y los fortines que defendían el principal Puerto de Venezuela.

CUPO: 30 (Solicitar la planilla de inscripción y más información al correo fundhea@hotmail.com)

RUTA: Plaza Vargas – Calle El Comercio – Casa Guipuzcoana – Muchinga - Calle Bolívar – ... Calle El León – Catedral – Casa José María España – (abordo Rustico rumbo) –Fortín San Carlos – Fortín El Vigía – Almacén de la Pólvora - Puente de Jesús – Ermita del Carmen

Cada participante deberá de contar con lo siguiente: COLABORACION: 55 Bsf. (incluye Guiatura, Transporte Rustico Catedral – Puente de Jesús - Fortín San Carlos – Fortín el Vigía, casa de la Pólvora, Ermita del Carmen, calles Plaza Vargas)
QUE LLEVAR: Ropa cómoda, Gorra, Zapatos Deportivo, Alimentos e Hidratación (almuerzo merienda) Protector solar y repelente de insectos. Dos Bolsas Grandes de Basura. Cámara Fotográfica (no pierdas el momento)

PUNTO DE ENCUENTRO:

CARACAS: torniquetes de la estación del metro de Gato Negro, salida Museo Jacobo Borges (a las 7:30am)

Edo.VARGAS: Plaza Vargas de La Guayra (a las 9am)
SOLICITAR LA PLANILLA DE INSCRIPCION Y MAS INFORMACION EN fundhea@hotmail.com

jueves, 10 de marzo de 2011

UN GUAYREÑO DIGNO DE ADMIRAR

Por: Derbys López

En nuestra Jornada de apoyo al Museo del Transporte Guillermo José Schael, conocimos a una persona, ya muy importante para nosotros, con todos los conocimientos y vivencias que encierra y con el cariño fraterno que demuestra en su trato, siempre respetuoso, siguiendo el manual de Carreño. Esta honorable persona es el Sr. Jorge Bello Domínguez, de 80 años de edad, siempre se ha dedicado al trabajo; Actualmente desempeña el cargo de bibliotecario del Museo del Transporte, ubicado en Caracas y es una persona digna de admirar por su sapiencia y ganas de seguir luchando en la vida. Dando continuidad a nuestro proyecto educativo “La Guayra Ecopatrimonial” le realizamos una entrevista personal para que nos contara de sus vivencias como Guayreño.

El Sr. Jorge Bello Nace en La Coruña, España, el 01 de enero de 1931. Llega a Venezuela como Inmigrante aun siendo un niño, su Familia se residencia en La Guayra, En la Esquina de Mamón a Cochera, actual calle Ricaurte, en la casa que todos en La Guayra llamaban “La casa de las 7 ventanas” Nos dice que aunque no nació aquí el es muy Guayreño porque paso años muy felices en La Guayra.

Paso su niñez jugando entre las extintas placita de los cañones y la Plaza Libertador, Bañándose y pescando en la Poza de el Puerto, mientras se escondía de su papá que trabaja de traductor en la Corporación “- allí en la poza aprendimos a nadar casi todos los de mi generación, lanzábamos el cordel y pescábamos sardinas y arenques, cualquier cosa se llevaba a la casa”

Su primaria la paso en la escuela Federal Santos Michelena, y en el Liceo José Maria Vargas, cuando este se encontraba en la calle El León. Sus primeros amores los llevo al Paseo 24 de Julio, a sentir la brisa marina agarrados de la mano. A los 16 años ya reportaba como corresponsal, los hechos ocurridos en el departamento Vargas al tabloide Sucesos de Caracas. De aquí le nace la pasión de ser periodista el cual culmina en la UCV, en la década de 1960, alternando los estudios con derecho y economía.

Con su voz pausada y respetuosa habla de La Guayra con gran sentimiento, de las personas a las que conoció, y comenta de todos los cambios sufridos en su pueblo. Habla muchos de sus viajes en el Ferrocarril ingles La Guayra a Caracas “se miraba embelesado y casi asustado aquellos barrancos que serpenteaban el tren, y el cambio de clima, a veces había calor y después un frió que obligaba a arroparse… uno sentía alivio al llegar al final del viaje, por que ya no se sufría de frió, de las curvas ni de los túneles, además los asientos eran de madera”

También nos habla de las peripecias que se tenia que hacer para ir a las agradables playas de Catia la mar, “Ir a Catia la mar era toda una excursión, había dos vías para ir al pueblo de Catia la mar, era una de ellas la que pasaba a la orilla de la playa, atravesando el Barrio Abisinia, cerca del leprocomio de Cabo Blanco, de allí se continuaba por el pueblo de Mare Abajo, bordeando la playa hasta llegar al Pueblo, de pocas calles, no muchas casitas y varios merenderos en la playa, con bastantes matas de uvas playera… la otra vía comenzaba por la vaquera de los Luy cerca de donde estaba el Negocio fuente de soda llamado Latin Quarter, era una trocha atravesada de cardones, cactus y muchas cascabeles, el cual pasaba al lado del aeródromo de Maiquetía y también pasaba por los terrenos de la hacienda Catia hasta la playa, Hoy Catia la mar no se parece en nada de lo que fue”

Del Aeropuerto de Maiquetía nos Cuenta: “Fue en 1948 que visite el aeródromo como un pasajero mas, la aduana era un ranchon, es decir un galpón de zinc, llegué a Maiquetía en un DC3 de TACA que venia de Coro, allí casi me enamoro de la primera aeromoza que veía y trataba… en 1951 ya se había construido el edificio moderno.”

Una anécdota muy jocosa que nos contó fue la primera vez que quiso irse de su casa, tomo su mochila y se enrumbo por el cerro Gavilán y se llego a las Ruinas de El Palomo, viendo siempre la cumbre del Ávila “-se que después de la montaña estaba Caracas, pero ya estaba cansado y con hambre, seguía viendo la montaña y después al mar… allí me senté y al caer la noche me regrese a mi casa donde me esperaban con la cena, jijiji cosas de muchacho, yo no llega a los 9 añitos”

Continuando con nuestra entrevista le preguntamos si había hecho el recorrido de la peregrinación de la Virgen de Lourdes, por el antiguo camino de los españoles, y con melancolía nos respondió “a mis 80 años nunca he conocido ese camino tan lleno de historias y espero irle a conocer antes de mi partida” Palabras que nos causaron una sensación de tristeza y de animo a la vez.

EL SUEÑO DEL SR. JORGE

Después de esta entrevista, nos quedamos compartiendo un poco mas y de verdad, el Sr. Jorge mostró mucho entusiasmo de conocer este camino colonial mientras le relatábamos nuestras actividades y caminatas por el.

Ya nuestra Fundación nos encontrábamos en la planificación del Primer recorrido de la Ruta “Camino Viejo Español a la Mar estudiamos la posibilidad de llevar al Sr. Jorge a este recorrido, y en reunión tomamos la decisión de llevarle ya que el recorrido se realizaría siempre en rustico, pero tomando todas las previsiones del caso.

El 01 de marzo de 2011, le comunicamos, vía telefónica, al Sr. Jorge que estaba cordialmente invitado a recorrer el camino de los españoles el día sábado 5 de marzo. Su voz expresaba esa alegría que solo expresan los niños ante un nuevo regalo… nos pido ¿que llevar?, ¿que había que hacer?, ¿en donde nos encontraríamos?” Y muchas preguntas más.

El viernes 04 de marzo nos vuelve a llamar para confirmar si se realizaría el paseo, que estaba emocionado y volvió a preguntar muchas cosas más.

El día Sábado 05 de marzo, nos encontramos en el centro de Caracas para enrumbarnos al punto de encuentro, nos confeso que había dormido poco por que pensaba que se quedaría dormido y no escucharía la alarma…

Se emociono al ver tantos participantes que irían a conocer el camino como el y se sorprendió cuando le dijimos que son 45 personas en total quienes iríamos al paseo.

Después de confirmar las asistencias y recibir los recaudos nos encaminamos a abordar los rústicos de la Asociación Civil “Los Castillitos del Ávila” y el cual nos notifican que han ocurridos derrumbes en la vía y que solo llegaremos hasta la venta, y completaríamos el recorrido con una Visita a los cultivos del Pueblo de Hoyo de la Cumbre.

El Sr. Jorge disfruto a sus anchas del paseo, recorrió varias veces el Fortín de la Cumbre, inspecciono con toda curiosidad infantil las ruinas de La venta, antigua posada colonial y quedo fascinado al ver parte del empedrado original del camino.

En el Pueblo Hoyo de la Cumbre, se quedo admirando el paisaje y los cultivos del lugar, y a cada rato se apartaba del grupo para meditar…

Aparte de eso nos deleito con muchas anécdotas de su vida, chistes y vivencias de un pasado que muchos añoran y solo se puede revivir en la memoria… y se ofreció voluntariamente a colocarse las mascaras que se estaban colocando los participantes para dar la bienvenida al carnaval.

Nos sorprendió a todos sacando unas fotocopias de fotos de su juventud jugando en la placita de los cañones, de sus compañeros de juego y de adolescencia… Nunca mostró cansancio durante el recorrido, y siempre quería que le contaran más y más historia. Realmente el Sr. Jorge Bello se gano el respeto y el cariño de todos los participantes.

Aun sigue llamándonos vía telefónica para agradecer este hermoso gesto, y que les dedicará un capitulo de sus diarios de vivencias (el escribe su biografía)

El personal que integramos la Fundacion Historia Ecoturismo y Ambiente nos sentimos satisfechos realmente haber compartido un maravilloso día con este Guayreño digno de admirar.

Fotos Cortesía: Maria Cristina Abdelnour, Roberto Iregui, Carlos E. González

lunes, 31 de enero de 2011

De La Guayra parte La Primera Carreta Cargada de Mercancía que llega a Caracas.


En enero de 1845 se realizo la inauguración del camino Nuevo de Maiquetía, proyectado desde los tiempos de Ing. Francisco Jacot. (Actualmente Carretera Caracas-La Guayra)

Esta inauguración fue el inicio del avance de las actividades Mercantiles en Venezuela, El transporte del los productos comercializados se realizaban a través de las bestias de carga.

La Construcción de esta vía (la primera en su estilo) causo que los costos de los fletes que se cobraban por las mercancías transportadas bajaran considerablemente, permitiendo el desarrollo de la agricultura y el intercambio comercial con la ciudad y los puertos importantes.

La Construcción de esta carretera sirvió de inicio para la construcción de los ejes carreteros del interior del país. Llevo mas de 40 años su construcción, donde se aderezo la antigua pica de Catia, y fue bajo el Gobierno del Gral. Carlos Soublette que se culmino, y aunque fue el 14 de enero de 1845 que se realizo la inauguración, se espero hasta el día 20 de enero, con el aniversario 175 de la Fundacion del pueblo San Sebastián de Maiquetía, el traslado de la primera carreta cargada de mercancías desde el puerto de La Guayra hasta la capital por la recién creada vía, siendo recibida en Caracas con un gran acto publico, discursos, fuegos artificiales, y mucha algarabía.